Este curioso animal es muy popular en la comida típica, prehispánica y tradicional de México, y uno de los complementos principales del mole poblano.
De carne blanca y exquisita, el guajolote es uno de los regalos que México ha legado al mundo entero.
El primer encuentro de este manjar con la gente del Viejo Mundo data de 1517, cuando Francisco de Córdoba arribó a la costa de Yucatán.
Desde luego el impacto también lo fue para Cortés, quien en una de sus cartas al emperador Carlos V refiere que millares de guajolotes se criaban en el palacio de Moctezuma.
Los españoles denominaron al huaxolotl, pavo por su semejanza con el pavón, el guajolote se popularizo por todo el mundo y se emplea para Navidad y festejos su deliciosa carne.
Otros nombres que se le dio fue gallo de Indias o pollo de Calcuta, en algunas regiones de México se le llama pípila o cócono, en Sudamérica chumpipe.